El 8 de junio de 1993, Vélez igualó 1-1 frente a Estudiantes en La Plata por la penúltima fecha del Clausura. Horas después, Independiente no pudo frente a Belgrano de Córdoba como local, y el Fortín gritó campeón tras 25 años de sequía.
El 21 de febrero de ese mismo año fue el principio de la era de Carlos Bianchi en Vélez. Aquella tarde, el equipo de Liniers hacia su presentación frente a Deportivo Español como visitante. El debut del Virrey fue con el pie derecho, ya que fue victoria por 2-0 con doblete del Turco Asad.
Vélez nunca soltó la punta, y tenía la posibilidad de dar su segunda vuelta olímpica una fecha antes de la culminación. Con ganar en el viejo estadio del Pincha, se quedaba con el título sin depender lo que sucedía a la noche en Avellaneda, ya que River perdía su partido frente a San Lorenzo y se quedaba sin chances de seguir en la lucha.
José Luis Chilavert de penal marcó su primer gol con el Fortín que acariciaba el campeonato. Pero sobre el final, apareció Claudio París con un bombazo para postergar el festejo. Vélez tuvo que esperar a que Independiente no ganara. Finalmente se dio el resultado anhelado, y en Liniers fue una fiesta al conseguir la segunda estrella a nivel local, y el primero de los seis que ganó con Carlos Bianchi.
Los números que llevaron a la conquista del Clausura registran 27 puntos, producto de 10 triunfos, siete empates y dos caídas, ambas de local. Marcó 23 goles y recibió apenas siete. Cabe destacar que cada victoria valía dos unidades.
El Clausura 1993 fue la base de la época dorada, ya que le permitió ingresar a la próxima edición de la Copa Libertadores tras 14 años de ausencia. Vélez terminaría levantando su primera copa internacional en el Morumbí, tras imponerse desde los 12 pasos. Fue el primer equipo argentino en ganar el certamen más importante de Sudamérica en Brasil, y así consiguió boleto para viajar a Tokio. Meses después, tocó el cielo con las manos al ser campeón del mundo al vencer al Milán de Fabio Capello por 2-0 con los goles del Cabezón Trotta y de Omar Asad.
Por: Lucas Morel
Twitter e instagram: @lucasmorel21
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