Hoy me voy a dirigir a la parcialidad de Ferro y al público en general, porque este club del barrio de Caballito tiene una rica historia y es importarte recordarla. Pero antes haremos un repaso de lo que le sucedió al club después de los logros importantes en los años 1982 y 1984. Hoy camina por el Nacional tratando de volver a la Primera División.
El 23 de diciembre del 2002, el club entró en quiebra por malas administraciones. A partir de allí, el club fue muy importante para los socios por lo social. Desde ese año, el club de Caballito estuvo intervenido por bajo el control de la justicia, que dispuso que fuera manejado por un órgano fiduciario. Después de algunos años, el Verde volvió en manos de sus socios.
En 1982, el club de Caballito se consagró por primera vez campeón del torneo Nacional e invicto. Aquel equipo que comandaba técnicamente Carlos Timoteo Griguol, jugó la final con Quilmes. Fue triunfo por 2 a 0 con goles Miguel Ángel Juárez y Juan Domingo Rocchia, un defensor que por el puesto que ocupaba convirtió 101 goles en 433 partidos.
Un dato más que curioso, ninguno de los equipos denominados grande pasó a la fase de clasificación, ya que se jugó en cuatro zonas de ocho equipos. River terminó sexto, Independiente tercero, Boca cuarto y Racing último. San Lorenzo no participó porque había descendido.
En total en ese torneo Nacional, Ferro disputó 22 encuentros, con 16 triunfos y seis empates, convirtió 50 goles y les convirtieron solamente 13 tantos. Cifras que evidencia la excelente campaña realizada por un equipo conducido de forma magistral por el Maestro Timoteo.
Pero eso no es todo, este conjunto verdolaga en el Nacional de 1984 volvió a mostrar su buen momento. Pero si dos años atrás había sido una locomotora, en este segundo se vio la mejor versión del Verde y se llevó el campeonato con autoridad. En ese entonces, el Nacional tenía fase de grupos, octavos de final, cuartos de final, semifinal, y final. Todas las llaves eran partidos de ida y vuelta. A la definición por el título llegaron Ferro y River.
En ese momento, el Millonario contaba en su equipo a Norberto Alonso y al uruguayo Enzo Francescoli que recién llegaba al club de Nuñez. Pero ni Alonso ni todas las tribunas juntas pudieron con el Verdolaga. Ferro ganó 3 a 0 en Monumental con goles del paraguayo Adolfino Cañete, Hugo Nuremberg y Alberto Márcico de penal.
La revancha se jugó en Caballito, donde los dirigidos por Griguol dieron catedra de fútbol. El local venció 1 a 0 con gol de Adolfino Cañete. Era tanto el dominio de Ferro que los portales de los diarios los catalogaron de baile. La hinchada de River no aguantó tanta superioridad que empezó hacer disturbio, y el juez con criterio a los 25 minutos del segundo tiempo dio por finalizado el partido y el mismo se le dio por ganado a Ferro. Esta es un poco la historia de un club que supo jugar la Copa Libertadores y hoy lucha para volver a los primeros planos de nuestro fútbol.
Nota escrita por: José María Matos
@josema1345
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